Los hechos ocurrieron en Pittsburgh, Estados Unidos, en donde una pareja retiró cuatro mil dólares (casi 70 mil pesos) en efectivo y los habían dejado en una bolsa sobre la barra de su cocineta.
La pareja se fue confiada a hacer sus deberes y grande fue su sorpresa cuando regresaron 30 minutos después y descubrieron que su perro se había comido casi todos los billetes de la bolsa.
La pareja buscó en línea “¿qué hacer si su perro se come el dinero?” y vieron que el efectivo mordido se podía enviar por correo a la Oficina de Grabado e Impresión de Dinero en Washington D.C junto con una carta en donde explicaran lo ocurrido, reclamaciones que pueden tardar de seis meses a tres años.
Ante esto, la pareja decidió mejor llamar a su banco, quien les dijo que esto pasaba muy a menudo y les aconsejó que esperaran a que su perrito expulsara de cualquier forma el dinero que se había comido.
Los días pasaron y el perrito expulsaba billetes de 50 y 100 dólares, los cuales eran recuperados y pegados con cinta adhesiva por sus dueños, quienes recuperaron alrededor de tres mil 500 dólares.
