«Nada, nada, nada. No, cuando hay groserías no. Ese es el lenguaje de otros y tampoco me quiero meter en asuntos. Antes hasta llegaba a considerar progre buena onda a los que decían groserías, y más si eran mujeres, y todo el mundo les celebraba. No hay necesidad de eso, por eso no respondo a eso», declaró el presidente López Obrador.
El mandatario destacó la importancia de mantener un tono respetuoso en el discurso público y señaló que, a pesar de las críticas, prefiere no caer en el intercambio de expresiones groseras. Afirmó que la conferencia matutina, conocida como la «mañanera», tiene su prestigio y reconoció que muchos quisieran aprovecharla para hacer propaganda, aunque mencionó la presencia de Ciro Gómez Leyva como uno de los periodistas que ya cumplen con ese rol.
Las declaraciones de AMLO surgen en el contexto de críticas y señalamientos por parte de la gobernadora de Chihuahua, Maru Campos, quien instó al presidente a «abrir los ojos» a la situación en el estado y tomar medidas para mejorar la seguridad. Campos expresó su posición sobre la necesidad de que el gobierno federal preste atención a Chihuahua y aborde los desafíos de seguridad en la región, utilizando un lenguaje más fuerte al exigir que el presidente «deje de ser omiso». En respuesta, López Obrador optó por n