El operativo, llevado a cabo en varias localidades de la provincia de Barcelona, resultó en la captura de 11 hombres y 3 mujeres, la mayoría de nacionalidad mexicana, con edades comprendidas entre los 30 y 70 años. Entre los detenidos figura el presunto líder de la organización, señalado como responsable directo del secuestro de la víctima, cuyo cuerpo fue hallado en un bosque de Tarragona en agosto, con signos de violencia y en avanzado estado de descomposición.
En registros efectuados en cinco domicilios y un restaurante en distintas localidades de Cataluña, los agentes descubrieron un laboratorio clandestino de extracción de metanfetaminas. Según las autoridades, la droga era enviada desde México impregnada en superficies sólidas, como piezas de ropa, para luego ser procesada en el laboratorio. Además, se incautaron grandes cantidades de éxtasis, una plantación de marihuana, armas de fuego, equipos tecnológicos y dinero en efectivo.
Investigación internacional
La operación fue resultado de una investigación conjunta entre la Policía Nacional de España y la Policía regional catalana, iniciada en junio tras una denuncia recibida a través de Interpol y Europol sobre el secuestro en Barcelona. Los secuestradores exigieron un rescate de 240,000 euros (más de 250,000 dólares) para liberar a la víctima, quien fue privada de su libertad entre el 31 de mayo y el 2 de junio.
El 5 de agosto, las autoridades localizaron el cadáver de la víctima en una zona boscosa, lo que intensificó la investigación y permitió identificar y detener a los presuntos responsables.
Operación de alto impacto
Este caso pone de relieve la capacidad operativa de organizaciones criminales transnacionales como el Cártel de Sinaloa en Europa, que no solo trafican drogas, sino también emplean métodos violentos para el control de sus operaciones. Las autoridades continúan con las investigaciones para determinar la magnitud de las actividades ilícitas de esta red en el continente.
La operación representa un golpe significativo contra el narcotráfico en la región y subraya la importancia de la cooperación internacional en la lucha contra el crimen organizado.