La situación de los médicos residentes del IMSS ha alcanzado un punto crítico. Los jóvenes profesionales denuncian amenazas y represaliaspor parte de médicos de base, subdirecciones y jefaturas de enseñanza, quienes buscan obligarlos a continuar trabajando sin recibir su salario.
Entre las represalias reportadas se encuentran la prohibición de acceso al comedor, amenazas de cancelación de rotaciones a hospitales externos, presión para seguir laborando sin pago, baja de la residencia por participar en la asamblea permanente, y acoso y hostigamientopor parte de directivos, jefes de servicio y jefes de enseñanza.
“Nos están castigando por exigir lo que nos corresponde”, expresaron los residentes, quienes aseguran que la situación se está saliendo de control. Ante la falta de respuestas por parte del IMSS, los médicos han decidido buscar el apoyo de dependencias centrales y legisladores federales, quienes ya han sido informados sobre el caso.
Esta crisis podría ser el detonante para una reforma profunda a las condiciones laborales de los médicos residentes, quienes no solo enfrentan precariedad salarial, sino también acoso y abuso de poder durante su formación.
Hasta el momento, el IMSS mantiene silencioante las denuncias, lo que ha generado indignación entre los residentes y la sociedad en general. La pregunta que todos se hacen es: ¿Hasta cuándo ignorarán a quienes sostienen el sistema de salud?