“Nadie está obligado a lo imposible y somos un Estado calificado por la misma Conagua como un Estado en extrema sequía”, expresó la mandataria estatal al referirse a la presión que se ha generado en torno al Tratado de Aguas de 1944. Campos destacó que Chihuahua es actualmente el único estado del país que se encuentra en esa condición, por lo que resulta inviable ceder agua que ni siquiera es suficiente para el consumo local y la actividad agrícola.
La gobernadora aseguró que su administración mantendrá la defensa del recurso hídrico chihuahuense, reiterando que no se pueden asumir compromisos internacionales en detrimento de las necesidades básicas de la población local.
“No podemos otorgarle agua a Estados Unidos cuando no tenemos agua y seguiremos defendiendo el agua”, enfatizó.
Campos también informó que su gobierno mantiene comunicación con autoridades federales, así como con representantes del Gobierno de Estados Unidos, con el objetivo de encontrar una solución que no afecte a los ciudadanos ni al sector productivo.
“Estamos ahorita platicando con el Gobierno Federal y por supuesto lo haremos con el Gobierno de Estados Unidos para encontrar la mejor situación para todos”, añadió.